"Ha sido otro tractor"

El odio latente entre bandos tiene muchas formas de demostrarse en este conflicto. Algunas de ellas pueden ser la segregacion o la indiferencia, pero la mas extrema se produce en esta zona a veces con demasiada asiduidad: Los enfrentamientos directos violentos y los atentados.

Estabamos descansando en las afueras de la muralla que separa la Jerusalem antigua de la nueva. Ademas de nosotros dos, tambien estaban dos amigos que participaran en el campo, Carles y Ester. De pronto, empezamos a oir sirenas. Al principio no nos parece nada importante. Aun asi, las sirenas no cesan, cada vez hay mas. Nos acercamos a preguntar a un agente de policia si sabe que es lo que ha sucedido. El nos contesta que"ha sido otro tractor". Tres semanas antes un palestino habia usado un bulldozer para tumbar un autobus tambien en Jerusalem, matando cuatro personas. En este caso la unica victima mortal era el conductor del vehiculo, a pesar de haber dejado mas de 10 heridos. Nos desplazamos hacia la zona donde se ha producido el suceso para saber que habia pasado realmente. Desplazandonos hacia la calle del incidente, vemos cada vez mas gente (periodistas, agentes de seguridad, turistas, etc.) Esta es nuestra oportunidad para captar qual es el ambiente real que se produce en Jerusalem despues de un suceso de estas caracteristicas. Sorprendidos, vemos que la mayoria de civiles que se acercan a la zona de los hechos son judios ortodoxos que aprovechan la presencia de la prensa para desplegar pancartas con mensajes politicos contrarios a las conversaciones de paz y a la politica que, segun ellos, esta llevando a cabo el gobierno de Israel. Nos acercamos a hablar con uno de ellos.

Nuestro interlocutor resulta ser un judio ortodoxo nacido en Mexico que lleva viviendo en Israel desde 2005. Sus motivos? exclusivamente religiosos. Nos explica que deseaba venir a vivir a la "tierra prometida" y a participar de la vida del estado de los israelies. Junto con su grupo, exponen una pancarta apoyando a un lider religioso israeli que desprecia al gobierno por sus teoricas concesiones a los arabes. Nos parece increible el discurso que mantiene, convencido, este chico. Profundizando en el, ademas de citar repetidisimas veces textos de la Tora y multidud de personajes que en ella salen, nos justifica la dureza de los metodos de actuacion policiales. Nos dice que tienen que protegerse de los arabes. LLevando la conversacion a un terreno mas politico, le preguntamos si ve alguna solucion a medio plazo al conflicto que le rodea. Su unica respuesta es la de que hay que echar los arabes de esta tierra, y reconquistarla, porque es su tierra prometida. Una vez mas se basa en textos sagradosa para justificarse: "Esta tierra es la que nos prometieron a nosotros, no a los arabes". Le planteamos que pasaria si se dividiese el pais en un estado israeli y uno palestino. Su respuesta? Los arabes no pueden tener un estado propio, solo usarian su nuevo poder para acabar con Israel.

"Miedo" es la palabra que mas veces se nos ha pasado por la cabeza desde que empezamos este viaje. No nuestro miedo individual. Nos referimos al miedo de los israelies a los arabes, miedo de la gente normal a los atentados, miedo de los oficiales en los checkpoints, miedo unos de otros. A pesar de que nadie lo demuestre, todos lo tienen aqui.

Al caer la noche se oyen algo parecido a disparos lejanos mientras estamos durmiendo en el hostel. Las patrullas siguen vigilando la ciudad entera, tambien por la noche. Abandonaremos esta ciudad en unas horas, despues de haber vivido dos de los dias mas intensos que recordamos viajando.

Mañana nos desplazamos temprano hacia el campo. Abandonamos el territorio que pertenece a Israel en direccion a Palestina. Empieza la tarea de cooperacion de verdad.